Surface Pro 8: potencia y flexibilidad para sacar el máximo partido a Windows 11

Surface Pro 8 es la nueva versión del buque insignia de la familia Surface, un conjunto de dispositivos y accesorios que no ha dejado indiferente a nadie desde su aparición hace más de una década, pero con la que Microsoft continúa superándose con cada miembro que llega al mercado. Y no lo tenían fácil, cabe señalar.

Es un hecho que los grandes fabricantes de PC tienen equipos estupendos, pero la familia Surface de Microsoft va un paso más allá y lo hace desde su primer lanzamiento, que tiene más mérito. La firma de Redmond podría haberse conformado con diseñar dispositivos al uso y afinar el software para con el hardware; sin embargo, han elegido arriesgar o, mejor dicho, innovar.

Surface ofrece actualmente un abanico de opciones adaptado a las necesidades de cada usuario, compartiendo en todos los casos las características por las que esta familia de dispositivos se ha hecho un hueco entre los usuarios más exigentes: un diseño distinguido, una construcción de gran calidad, componentes de primeras marcas que garantizan el mejor rendimiento y, por supuesto, una simbiosis entre hardware y software que pocos fabricantes logran alcanzar.

Es cierto que lo han conseguido con truco, porque cuando eres el creador del hardware y desarrollas el software partes con ventaja, pero al César lo que es del César… Y cuando hablamos de PC, Microsoft es el César. Ahora bien, este César tiene toda una familia de dispositivos por ofrecer y cada uno de ellos puede presumir de sus propios puntos fuertes, en ocasiones compartidos, pero optimizados según el modelo para impulsar la productividad en su ámbito concreto. ¿En qué destaca Surface Pro 8? Vamos a descubrirlo.

En pocas palabras, Surface Pro 8 sigue siendo el de siempre, pero mejor. Esto es, un equipo versátil cuya principal virtud es aunar la esencia tradicional del híbrido entre Tablet y portátil con un ajustado equilibrio entre potencia y flexibilidad. Surface Pro 8 es el equipo que elegiría un profesional -o, para el caso, cualquier usuario exigente- que busca un dispositivo “todo en uno” sin restricciones de potencia o flexibilidad.

-Surface Pro 8 a primera vista

Surface Pro 8 destaca desde el primer vistazo, como ya hemos señalado, por un diseño fino. Este extremo presenta poco debate: basta con poner los ojos sobre el equipo para darse cuenta de ello. Surface Pro 8 es, ante todo, elegante. Tiene unas formas bien definidas, sea en modo Tablet -posado sobre su característico soporte trasero- o en compañía de alguno de los teclados exclusivos diseñados por Microsoft.

Con respecto al teclado, existen varias opciones: desde una versión más básica llamada Surface Pro Keyboard, a una más completa y personalizable como son los teclados Signature. En ambos casos hablamos de accesorios hechos con materiales de calidad, compactos y elegantes, diseñados para acoplarse magnéticamente al dispositivo. ¿En qué se diferencian? En las opciones de que dispone cada uno. Tenemos dos versiones del teclado Surface Signature una que viene equipada con el Slim Pen 2 y un espacio para cargarlo y otra con solo el espacio de carga. Además, en ambas versiones tenemos varias opciones en cuanto a colores. El material con el que se fabrican se conoce como Alcantara, un material resistente con el que se hacen el interior de los coches Ferrari por ejemplo.

El Teclado Signature para Surface Pro es un elemento indispensable como teclado, pero también como soporte del Surface Slim Pen 2, un lápiz desarrollado con minuciosidad para los dispositivos de Microsoft compatibles que permite transformar la pantalla de Surface Pro 8 en un cuaderno de notas manuscritas, un lienzo digital… Lo que se desee.

Por su parte, la cubierta exterior de Surface Pro 8 está hecha en aluminio anodizado emblemático, por lo que el equipo puede presumir de ligereza sin perder robustez. Pero además, da una sensación al tacto agradable, similar a la de los equipos construidos en aluminio corriente, pero más suave. Lo podemos encontrar en dos colores diferentes: plateado brillante (platino) y un carbón oscuro sin llegar al negro (grafito).

Surface Pro 8 cuenta asimismo con botones físicos de inicio y apagado, otros para controlar el volumen, además de las entradas para las diferentes conexiones.

Surface Pro 8 renueva varios detalles en comparación con su anterior versión, al tiempo que mejora sus capacidades. Así, mientras que unos bordes más redondeados refinan su perfil, la reducción del tamaño del bisel permite que el equipo estrene una pantalla PixelSense Flow de 13 pulgadas, relación de aspecto 3:2 y una resolución de 2.880×1.920 píxeles (267 ppp), con la que mantiene su formato de ultra portátil, pero con la que gana más espacio para el contenido.

La pantalla del nuevo Surface Pro 8 es sin duda el alma del equipo. Es un 2 en 1 cuya experiencia táctil es una característica elemental del mismo. En este caso, además, tiene compatibilidad con Dolby Vision y dispone de una tasa de refresco de hasta 120 hercios dinámicos en función del contexto y color adaptable con los que conseguir la mejor fluidez siempre que se requiera. Esta frecuencia de actualización cobra especial valor al moverse por el escritorio, ver vídeos o jugar. Por otro lado, si simplemente estás escribiendo un documento, la frecuencia se reduce hasta los 60 Hz y, en consecuencia, consume menos recursos.

Es importante destacar la ligereza de todo esto ya que cabe en apenas 28,7 centímetros de ancho por 20,8 de alto, 9 milímetros de grosor y un peso de 891 gramos. Desde luego, es todo un ultraligero que se sirve con el mínimo embalaje posible y con tu teclado lo proteges sin necesidad de una funda adicional.

-Surface Pro 8: esto es todo lo que esconde su cara bonita

Si el nuevo Surface Pro 8 es interesante por fuera, no lo es menos por dentro. El equipo viene con lo último de Intel en procesadores portátiles tanto en potencia como en eficiencia, el margen habitual para la elección de componentes básicos, opciones de conectividad suficientes y una batería con la que gozar de una autonomía generosa. Veamos todos estos elementos por partes.

Las especificaciones técnicas básicas de Surface Pro 8 incluyen:

Procesador: Intel Core i5-1135G7 o i7-1185G7 de cuatro núcleos

Memoria: 8, 16 o 32 GB de RAM (LPDDR4x)

Gráficos: Intel Iris Xe Graphics

Almacenamiento: 128, 256, 512 GB o 1 TB SSD NVMe

Batería: 51,5 Wh

Como se ve, la CPU la ocupan procesadores Intel de 11.ª generación, diseñados para ultra portátiles y enfocados, por lo tanto, en ofrecer un rendimiento y consumo equilibrados para este tipo de dispositivos. Ambos procesadores se nutren de los gráficos integrados Intel Iris Xe Graphics, los más potentes lanzados hasta la fecha.

Un dato importante acerca del almacenamiento es que la unidad SSD es extraíble, algo muy innovador en un dispositivo tan delgado y con una alta integración de los componentes como Surface Pro 8. Gracias a este detalle, es posible ampliar su capacidad o desmontarlo cuando el dispositivo se va a reciclar, algo de gran interés en entornos empresariales para proteger los datos corporativos.

Su batería promete «hasta 16 horas de uso típico del dispositivo», según se indica en la información oficial, lo cual suele significar que la autonomía real es sensiblemente inferior. Cuán inferior dependerá de la carga de trabajo. En todo caso, incluso con el ajuste de rigor, la autonomía está a la altura de lo esperado y es más que suficiente para cumplir con creces una jornada laboral.

Como interludio entre los componentes básicos y la conectividad que trae el equipo, el apartado multimedia consta de dos cámaras, una frontal de 5,0 MP con vídeo full HD 1080p -ideal para hacer videollamadas con alta calidad dado el contexto de trabajo híbrido en el que nos encontramos- y soporte de autenticación facial mediante Windows Hello, y una trasera de 10,0 MP con autofoco y vídeo HD 1080p y 4K. El conjunto se completa con dos micrófonos de estudio de campo lejano, altavoces estéreo de 2 W con Dolby Atmos y, cómo no, conector de auriculares de 3,5 mm.

¿Te gusta ver cómo un dispositivo tan puntero sigue contando con una entrada de auriculares estándar? Entonces te van a gustar también las opciones de conectividad que incluye Surface Pro 8:

•2 puertos USB-C con USB 4.0 con Thunderbolt 4

•1 puerto Surface Connect

•Wi-Fi 6 compatible con 802.11ax

•Bluetooth 5.1

En efecto, Surface Pro 8 amplía los puertos USB-C para mayor conectividad en comparación con su versión anterior, al tiempo que conserva todas las demás conexiones. Por supuesto, tampoco faltan en el dispositivo sensores varios como acelerómetro, giroscopio, magnetómetro o un sensor de colores de ambiente para adaptar el brillo y tono de la pantalla.

Por su parte, el dispositivo llega con Windows 11 instalado, el flamante estándar para PC que se renueva en forma y fondo para ofrecer la mejor experiencia de escritorio que nos ha dejado Microsoft hasta la fecha, y que imbuido en la potencia y prestaciones de Surface Pro 8, adquiere un nuevo nivel. Surface Pro 8 ha sido diseñado para destacar lo mejor de Windows 11, extremo sobre el que, no obstante, no nos vamos a extender, porque es casi el pan nuestro de cada día aquí en MC y poco podemos añadir que no hayamos dicho ya a lo largo de los últimos meses.

Por resumirlo, Windows 10 nos gustó mucho, pero Windows 11 nos está gustando más y Surface Pro 8 se antoja como el equipo ideal para disfrutarlo. Además, Surface Pro 8 llega listo para la acción, con las aplicaciones de Microsoft 365 instaladas, una prueba de 30 días a Microsoft 365 Familia, así como con la aplicación de Xbox y una prueba de un mes de Xbox Game Pass Ultimate.

-Surface Pro 8 en acción

No hace falta indagar mucho en detalles para ver que Surface Pro 8 tiene un rendimiento excepcional, como no podía ser de otra manera teniendo en cuenta los componentes de los que hace uso. Además de ser un equipo potente, apto para realizar todo tipo de tareas allá donde te encuentres, goza de unas dimensiones y peso reducidos, así como de una gran autonomía. En un contexto de trabajo híbrido en el que constantemente necesitamos estar en movimiento con dispositivo bajo el brazo, debemos tener en cuenta estas características.

A nivel de rendimiento, está a la par de cualquier ordenador portátil de gama alta, con el extra de flexibilidad que le otorga su faceta de Tablet, un poderoso aliado dependiendo de las circunstancias y mucho más, según a qué te dediques. Así, este modo del dispositivo puede ser simplemente un añadido con el que enriquecer la experiencia de uso en trayectos o en momentos de relax en los que no apetece estar con el teclado, o puede suponer una transformación radical si lo combinamos con un lápiz digital.

-Surface Pro 8 no necesita más palabras

Surface Pro 8 en pocas palabras, después de las muchas que le hemos dedicado ya al aparato y su idiosincrasia, se podría resumir en “el mejor Surface que ha lanzado Microsoft hasta la fecha”, hablando siempre por el que hemos presentado como el buque insignia de la familia, un equipo multipropósito, y no uno más específico, que también lo hay.

¿Todo es positivo? ¿No hay margen de mejora? Evidentemente no… y sí, respectivamente, pero con matices. Por ejemplo, la versión más económica del Surface Pro 8 arranca a partir de los 976 euros y por ese precio hay portátiles que por sus componentes pueden resultar más atractivos… pero son solo portátiles, no convertibles tan versátiles y a la vez ligeros como Surface Pro 8.

Asimismo, los gráficos integrados de este dispositivo de Microsoft son más que suficientes como para jugar a una gran cantidad de títulos clásicos y modernos, pero no pueden con los lanzamientos más exigentes del momento. Para eso sería necesario contar con una tarjeta gráfica dedicada que rompería por completo con el concepto de portabilidad que desprende un ultra portátil como, en efecto, es este. Nada que objetar en este aspecto, ya que Surface Pro, por definición, no es un equipo para jugar.

En definitiva, Surface Pro 8 es una apuesta segura para quien busque un equipo de semejantes características, un 2 en 1 enfocado en la productividad y en la movilidad todoterreno con toda la potencia de un portátil o, más bien, un ultra portátil de su rango, pero con la versatilidad que aporta una faceta de Tablet que va más allá de la mera pantalla táctil que tantos equipos incorporan actualmente.

Fuente: https://www.muycomputer.com/