Poder adquirir/tener Windows 11 se ha estancado en estos últimos meses y especialmente las organizaciones podrían tardar bastantes años en abrazar el nuevo sistema operativo.
Si bien Windows 11 comenzó con una rápida adopción en aquellos primeros usuarios valientes que quisieron probar el nuevo sistema operativo de Microsoft, lo cierto es que en estos últimos meses se ha estancado, y a día de hoy incluso sistemas operativos antiguos como Windows 7 y Windows XP están presentes incluso en un mayor conjunto de ordenadores.
Así lo señala el nuevo informe del proveedor de software de gestión Lansweeper que no deja en muy buen lugar al nuevo sistema operativo de Microsoft. De hecho con los datos que ponen sobre la mesa, Windows 7 se sitúa con un 4,7 % de cuota de mercado, mientras que Windows XP está al 1,71 %. Por otra parte Windows 10 sigue liderando la cuota con una base instalada de 80,34 %.
A modo de comparación Windows 11 solo se ejecuta en el 1,44 % del total de todos los ordenadores activos, según este informe. El mayor reto al que se va a enfrentar Microsoft para que Windows 11 esté más presente, es a la dificultad de actualizar para los ordenadores algo más antiguos que no cumplen con los requisitos. Según Lansweeper más de la mitad de los ordenadores actuales no pueden actualizarse a Windows 11.
Y es que solo los ordenadores comprados en los últimos dos o tres años son compatibles con el nuevo sistema operativo de Microsoft. Esto provocará que la adopción de Windows 11 sea más lenta respecto a sistemas operativos anteriores, dado que se necesitarán años hasta que la mayoría de los equipos que estén activos sean compatibles con el sistema operativo.
Si bien Microsoft ha suavizado su posición, permitiendo a dispositivos no compatibles actualizarse a Windows 11, se requiere una instalación manual dirigida a usuarios experimentados, con lo que quedan fuera de la ecuación la mayoría. Y en este último caso, si un usuario decide obligar a la actualización de Windows 11 en su sistema no compatible, se enfrentaría a la imposibilidad de que pueda recibir actualizaciones de seguridad oficiales.
En todo caso cabe aclarar que estas cifras son estimaciones realizadas por la empresa Lansweeper basándose en más de 30 millones de dispositivos que son utilizados por más de 60.000 organizaciones.