El Intel Core i9-13900K está llamado a convertirse, si todo va según lo previsto, en el próximo procesador tope de gama del gigante del chip. No es la primera vez que hablamos de esta CPU, ya os contamos en su momento que estará fabricado en el nodo Intel 7 (10 nm con una densidad de transistores superior al nodo de 7 nm de TSMC), y también os dijimos que estará configurado con 24 núcleos y 32 hilos.
Ese aumento de núcleos e hilos será posible gracias a un incremento notable de los núcleos de alta eficiencia, ya que los núcleos de alto rendimiento se mantendrán en la misma cuantía que vimos en Alder Lake-S.
-¿Qué significa esto?
Pues muy sencillo, que el Intel Core i9-13900K estará configurado con 8 núcleos de alto rendimiento, basados en la arquitectura Raptor Cove, y 16 núcleos de alta eficiencia, basados en la arquitectura Gracemont.
El HyperThreading solo afectará a los núcleos de alto rendimiento, lo que explica por qué el Intel Core i9-13900K podrá trabajar con un total de 32 hilos. En total, este nuevo chip tendrá 68 MB de caché, una cantidad enorme que nos permite augurar una mejora notable del rendimiento, incluso aunque los cambios a nivel de microarquitectura frente a Alder Lake-S acaben siendo menores. Todavía no hay nada seguro, pero las filtraciones más recientes decían que la mejora en términos de IPC podría ser de entre un 10% y un 20%.
-Intel Core i9-13900K: Más núcleos y una velocidad de hasta 5,8 GHz
Según un nuevo rumor esa sería la velocidad velocidad máxima que alcanzaría el Intel Core i9-13900K. No se concreta en qué condiciones, pero por simple lógica creo que estaríamos hablando del valor máximo que podría alcanzar dicho procesador trabajando con un núcleo activo, es decir, en monohilo, ya que bajo ese tipo de carga de trabajo es cuando los procesadores Intel pueden alcanzar su pico máximo en modo turbo.
Aunque esto pueda reducir un poco las expectativas, debemos tener presente que el modo turbo del Intel Core i9-13900K escalará en función de los núcleos activos, como ya ocurre con el Intel Core i9-12900K, lo que significa que en juegos, donde el grado de paralelización suele ser relativamente bajo y es raro que se lleguen a saturar más de ocho hilos, podría ser capaz de mantener unas frecuencias bastante elevadas, y que no debería tener problemas para mantenerse por encima de los 5 GHz con una carga multihilo considerable. Si se cumplen todas las filtraciones que hemos visto hasta ahora, el Intel Core i9-13900K lo tendría todo para poner las cosas difíciles a AMD.
Por su parte, la compañía de Sunnyvale responderá al lanzamiento de Raptor Lake-S con Zen 4, una generación de CPUs de alto rendimiento que mantendrá el diseño modular que vimos en Zen 3, aunque dará el salto al nodo de 5 nm y promete un aumento sustancial del IPC, además de una subida de frecuencias que permitirá a AMD superar, por fin, la barrera de los 5 GHz.