Raspberry Pi se ha convertido en el mini-PC de arquitectura ARM más conocido del mundo. A pesar de que nació en un principio con el foco puesto en el sector educativo, las posibilidades ofrecidas por algunos modelos han extendido su uso en áreas como el IoT, los centros multimedia, las máquinas de retrogaming, los servidores, sectores industriales e incluso han sido empleados como base para que Oracle construyera una supercomputadora. Sin embargo, y a pesar del éxito, todo parece indicar que Raspberry Pi 5 empezaría a ser comercializado, como muy pronto, en el año 2024, así que en 2023 no veremos nuevos modelos al menos dentro de esa línea.
Ha sido Eben Upton, CEO de Raspberry Pi, quien dio la noticia en torno al Raspberry Pi 5 en una entrevista concedida a Christopher Barnatt, persona que está detrás del canal de YouTube ExplainingComputers. Al parecer desde la empresa responsable de los mini-PC esperan que 2023 sirva para recuperarse de la escasez de chips y al menos mitigar los problemas de suministro habidos desde la pandemia de COVID-19. Eso sí, viendo el convulso panorama en el que vivimos, es probable que otra la crisis, la provocada por la invasión de Rusia a Ucrania, termine generando otros problemas.
Upton ha explicado que sería un desastre si lanzan el Raspberry Pi 5 en 2023 y la producción no pudiera aumentar adecuadamente por alguna restricción o por el hecho de que canibalice algún elemento dentro de la cadena de suministro. Otra situación que podría darse es que el Raspberry Pi 5 afecte a la recuperación de modelos anteriores que todavía tienen una gran demanda. El directivo ha dicho que espera que la situación empiece a mejorar a partir de la segunda mitad del año 2023, fechas en las que los obstáculos deberían de empezar a disminuir y por ende se allanaría el terreno para el lanzamiento del Raspberry Pi 5 en 2024.
La decisión tomada por los directivos hará que la brecha entre Raspberry Pi 4 y Raspberry Pi 5 sea la más grande vista entre dos generaciones del conocido mini-PC. Sin embargo, es buena viendo que resulta difícil encontrar unidades del Raspberry Pi 4 Model B, por lo que de esa manera se ahorran el tener que responder a una demanda y unas expectativas que en estos momentos no pueden cumplir.