El correo electrónico que vinculas a ella y su contraseña pueden cambiar, del mismo modo que puedes hacerlo con el resto de datos personales que aportes. Lo único que hay que tener es algo de cuidado dependiendo de la situación, pero Apple nos lo ha puesto fácil para poder mantener la configuración correcta de nuestra cuenta y poder cambiar tu ID de Apple cuando quieras.
-¿Cómo podemos cambiar tu ID de Apple y tenerla siempre al día?
Lo primero es lo primero, hay que saber cuál es nuestra ID de Apple. Deberías saber cómo mínimo el correo y la contraseña de esa cuenta. En momentos de imprevisto eso es información que agradecerás haber memorizado, porque la ID de Apple debe estar configurada en todos nuestros dispositivos.
Lo mejor para cambiar los datos de nuestro Apple ID es hacerlo a través de nuestro iPhone, ya que seguramente deberemos recurrir a él para poder pasar la autenticación de dos factores aunque usemos un Mac o un navegador. Si no tenemos un iPhone, entonces podemos hacerlo mediante la web de las ID de Apple.
En el iPhone podemos hacer los cambios pertinentes desde la aplicación Ajustes. Nada más entrar en ella veremos nuestro nombre en la cabecera, y si pulsamos en él accederemos a las opciones de nuestra ID de Apple. La primera de ellas, ‘Nombre, teléfonos, correo’ nos permite cambiar todos esos datos personales. Pero debes tener en cuenta lo siguiente:
•El correo nuevo que quieras añadir no puede ser la dirección @icloud.com de otra cuenta de Apple que tengas.
•El correo nuevo que quieras añadir tampoco puede ser uno que utilice otra Apple ID, sea del proveedor que sea y aunque sea un simple correo de recuperación.
•Tu ID de Apple jamás debe llevar el correo electrónico de otra persona o uno al que ya no tengas acceso por la razón que sea.
•El teléfono nuevo que quieras añadir debe de ser tuyo, y Apple realizará una comprobación a través de un mensaje SMS para confirmarlo. Puedes tener varios números de teléfono asociados a un Apple ID.
En ‘Contraseña y seguridad’ encontraremos la opción ‘Cambiar contraseña’ para hacer justo eso. No deberíamos tener problemas adicionales si el iPhone está correctamente configurado, y eso incluye atender todas las solicitudes de seguridad que haya pendientes en esas secciones.
Apple no permitirá que uses contraseñas demasiado sencillas, como por ejemplo una que incluya tu nombre o tu año de nacimiento. Tampoco admitirá contraseñas que hayas usado en el pasado, por cuestiones de seguridad. Debe de ser algo con un mínimo de complicación. Recuerda que la autenticación de doble factor es obligatoria para la mayoría de funciones de las aplicaciones y servicios de Apple.
Como he dicho antes, podemos hacer los mismos cambios en la web de las Apple ID. Es menos directo que con el iPhone, ya que se te pedirá la autenticación de doble factor para acceder a todas las opciones, pero puede ser una opción si no tienes un iPhone o si no lo tienes a mano. Sí que necesitarás otro dispositivo de Apple (un Mac o un iPad) para poder completar el inicio de sesión.
Por cierto, también puedes eliminar completamente tu ID de Apple (puede que abandones el ecosistema o te hayas hecho otra). El proceso tarda unas semanas en completarse del todo, pero Apple garantiza que todos tus datos quedan completamente eliminados. Para que todo se sincronice bien, lo más primordial es que tengas una misma Apple ID configurada en todas partes.