Hablamos de una versión del sistema operativo que desde su nacimiento ha estado rodeado de polémica, tanto a nivel funcional como de aspecto. Precisamente por todo ello, y a falta de poco más de un año de que Windows 10 deje de recibir actualizaciones, todavía sigue siendo el sistema operativo para equipos de sobremesa más utilizado.
Y es que buena parte de los usuarios en todo el mundo se están mostrando bastante reacios a dar el paso e instalar la última versión en sus equipos. Son varias las razones que muchos de ellos comentan, y quizá esperen al último momento para realizar la migración. Incluso los hay que están dispuestos a seguir pagando a partir del próximo año 2025 para seguir recibiendo actualizaciones de Windows 10. De ahí que a continuación os vamos a hablar de algunas de las más importantes razones por las que muchos siguen trabajando en Windows 10 y rechazan el uso de Windows 11.
-Windows 11 tiene mucho que mejorar para convencernos
Todo ello a pesar de los esfuerzos de la propia Microsoft para adaptar la nueva versión del sistema a las necesidades y requerimientos de sus millones de clientes. Estas son algunas de las principales razones por las que merece la pena seguir utilizando Windows 10.
La interfaz de Windows 11 tiene muchas carencias: Con el claro fin de modernizar el aspecto de la nueva versión del sistema, Microsoft ha eliminado algunas importantes funciones y características en apartados tan relevantes como el menú Inicio o la Barra de tareas.
El hardware del equipo sigue siendo un problema: Una de las principales controversias que ha generado Windows 11 son los requerimientos exigidos por Microsoft. A día de hoy son muchos los ordenadores que no cumplen con los mismos, incluso haciendo equipos de última generación, por lo que seguir en Windows 10 es una gran idea.
Windows 10 funciona mejor al jugar: Muchos usuarios utilizan su ordenador para pasar una buena cantidad de horas jugando. Por varias razones, la versión anterior del sistema operativo se comporta mejor, con el mismo hardware, a la hora de jugar, que Windows 11. Y esta es otra de las razones por las que multitud de personas prefieren no actualizar.
Los anuncios no tienen razón de ser: Últimamente, Microsoft está añadiendo cada vez más anuncios en Windows 11 que aparecen en diferentes apartados. Así promociona productos propios, funciones del sistema operativo, e incluso programas de terceros. Esto causa un gran rechazo entre los usuarios, más si tenemos en cuenta que hablamos de un software de pago.
Las actualizaciones de Windows 11 son problemáticas: A pesar de los esfuerzos del gigante del software, los problemas y fallos con las actualizaciones que envía siguen vigentes en la nueva versión. De ahí que muchos prefieran seguir utilizando la anterior, ya que es un sistema más estable.