Microsoft realizó varios cambios en Windows 11 que quitaban usabilidad

Algunas de las decisiones de diseño en Windows 11 llegaron a provocar que el sistema sea mucho menos práctico en ciertos aspectos. Ahora Microsoft se retracta ante ello, devolviendo este apartado a su estado anterior.

Lo que ocurría con la bandeja del sistema era que, Microsoft decidió cambiarla para satisfacer las necesidades de los equipos táctiles. En cambio en escritorio comenzó a dar problemas, principalmente porque desapareció la opción de reordenar los iconos o la función de arrastrar y soltar, descontentando a los usuarios.

-Ha regresado la anterior bandeja del sistema

Este cambio vino con la build 22563 de Windows 11, y si bien suponía un cambio de diseño que encajaba con los estándares de Windows 11, convertía la bandeja del sistema en algo menos práctico debido a la limitación de estas funciones. Esto se notaba menos en interfaces táctiles, pero en escritorio era algo que no sentó bien.

Con motivo de ello, Microsoft ha dado marcha atrás en su decisión, regresando al estado anterior de la bandeja del sistema en la build 22616. Esto permite que las funciones de arrastrar y soltar, además de la opción de ver los iconos ocultos, regresen a todos los usuarios del sistema operativo.

Además de esta actualización, Microsoft prepara un gran aluvión de novedades para la última versión de su sistema operativo, todas ellas disponibles en la actualización Windows 11 22H2. Aquí la compañía promete ofrecer mejoras de optimización en pantallas táctiles, nuevos gestos, cambios en el menú de inicio, y nuevas formas de organizar las ventanas, entre otras muchas cosas.

La popularidad de Windows 11 no está alcanzando el nivel de sus anteriores versiones. Prueba de ello son los datos que nos ofrece Steam, donde en el mes de abril había casi un 19% de equipos con Windows 11 instalado, algo que ya superaban con creces Windows 10 o Windows 7 en el mismo tiempo desde su lanzamiento. El último sistema operativo de Microsoft es el que más está sufriendo la llegada de nuevas funciones a través de actualizaciones, prueba de que la compañía no tenía del todo listo el sistema operativo en su lanzamiento.