Windows 11 ha estado acompañado de diversos fallos desde que se produjo su lanzamiento en octubre de 2021. No todos esos fallos han tenido el mismo impacto ni han afectado de la misma manera a los usuarios, y tampoco han sido igual de molestos. Por desgracia, lo que sí ha sido común en la mayoría de los casos es la lentitud de Microsoft para resolverlos.
Sin duda uno de los fallos más molestos en Windows 11 se descubrió hace cosa de un año, y estaba relacionado con el explorador de archivos. Dicho fallo era bastante aleatorio pero muy molesto porque, en resumen, hacía que el explorador de archivos apareciese de la nada sin motivo cuando hacíamos algo que no tenía nada que ver con él. Así, por ejemplo, podíamos estar jugando a un juego y este podía aparecer de repente en primer plano.
Como habréis podido imaginar este fallo no solo puede resultar extremadamente molesto, sino que también nos puede dar un buen susto, ya que en un primer momento cualquier usuario medio pensaría que podría tratarse de algo relacionado con una infección por malware. Es totalmente normal, ya que estos comportamientos se asocian normalmente a este tipo de amenazas.
Imaginar ahora el miedo y la frustración que puede llegar a causar esa asociación y descubrir, horrorizados, que nuestras soluciones de seguridad no encuentran ningún tipo de amenaza en el PC. Nervios, preocupación y molestias varias que además se ven acompañadas de tiempo perdido intentando encontrar una solución a un problema que en realidad es culpa de Microsoft.
Al ser un fallo con un componente aleatorio tan marcado no era fácil de reproducir, y por tanto encontrar una solución parecía imposible, pero afortunadamente Microsoft ha logrado «dar con la tecla» y ya ha sido resuelto. No sabemos exactamente cómo ha conseguido el gigante de Redmond ponerle fin, pero tengo constancia de que más de un usuario acabó tan molesto con este fallo que incluso tuvo que volver temporalmente a Windows 10.
La solución a este fallo se encuentra integrada en la última actualización acumulativa que ha lanzado Microsoft este mismo mes, y es curioso porque dicha actualización está dando problemas con la conectividad Wi-Fi. Qué puedo decir, estamos ante una actualización que resuelve e introduce fallos, algo que en el fondo no me sorprende porque me conozco el historial que arrastra Microsoft con Windows 11, y también recuerdo los problemas que hemos vivido con las actualizaciones de Windows 10.
Si estás sufriendo ese fallo con el explorador de archivos es recomendable que instales la actualización KB5032288, pero ten en cuenta que dicho parche puede acabar dándote problemas con el Wi-Fi. Obvia decir que si utilizas una conexión cableada a Internet no tendrás nada de lo que preocuparte, ya que en ese caso no te verás afectado por dichos problemas.