A lo largo del tiempo hemos visto varios errores en Windows. Algunos de estos problemas eran internos y afectaban directamente a la seguridad del sistema operativo, obligando a Microsoft a actuar rápido para poder dar solución cuanto antes. Sin embargo, otros de los problemas no estaban centrados en la seguridad, sino más bien en la usabilidad, por lo que Microsoft los ha dejado un poco en segundo plano no dándoles tanta importancia como deberían.
-La protección de seguridad local está desactivada
En marzo de este mismo año, una actualización de Microsoft Defender Antivirus hizo que el antivirus de Windows empezara a mostrar un desconcertante error llamado ‘la protección de seguridad local está desactivada. Su dispositivo puede ser vulnerable’.
Este error hace que el mensaje aparezca a todos los usuarios del equipo, independientemente del nivel de privilegios que tuvieran. Es cierto que los administradores podían activar la función en los dispositivos afectados, pero ya implica un problema de seguimiento a la hora de tener un control sobre la seguridad global del sistema.
Microsoft lanzó una actualización de Windows Defender para corregir este problema el pasado mes de mayo, pero tuvo que revertirla debido a unos problemas que no se han detallado. Ahora, dos meses más tarde, finalmente parece que ya tiene la solución lista, y Microsoft ha puesto remedio a este problema de una vez por todas.
Para solucionar este error en Windows Defender no tenemos más que instalar el parche KB5007651 en nuestro sistema, el cual debería llegar automáticamente sin problemas a todos los ordenadores con Windows 11. Si tenemos prisa por dar solución a este problema, siempre podemos instalar la actualización a mano.
-Comprobar que el antivirus está actualizado
Para comprobar que el parche está instalado, y que la función de aislamiento del núcleo está ya correctamente habilitada, lo que tenemos que hacer es abrir el panel de configuración de Windows con el atajo de teclado Windows + I, e ir al apartado Privacidad y Seguridad. Allí buscaremos el apartado de ‘Seguridad de Windows’, y acto seguido haremos clic sobre ‘Seguridad del dispositivo’.
Ahora simplemente nos queda entrar en el apartado de «Detalles de aislamiento del núcleo» y comprobar que, en efecto, está todo correctamente habilitado y funcionando. Además, si entramos en el apartado ‘Acerca de’ de Microsoft Defender veremos que la versión global de la seguridad que tenemos instalada en el PC es la ‘1.0.2306.10002’.