Microsoft Edge es para muchos un muy buen navegador web, pero no es menos cierto que la compañía que lo impulsa ha jugado sucio para imponer su uso en Windows. A pesar de que el gigante de Redmond ha tenido que suavizar su postura ante las críticas recibidas con anterioridad, no abandona su aspiración de obligar a usar su navegador web al menos a través de sus propios servicios y aplicaciones, y de hecho ya ha empezado a notificar que los enlaces abiertos desde cuentas de Microsoft 365 en Outlook y Teams ignorarán el navegador web predeterminado establecido en Windows para forzar su apertura, al menos en un principio, en Microsoft Edge.
Como era de esperar, el aviso de la corporación originaria de Redmond está levantando ampollas que pueden verse publicadas en Reddit, red social en la que administradores de TI han publicado mensajes procedentes del centro de administración de Microsoft 365 que muestran la intención real de la empresa de implementar la imposición de abrir enlaces en Edge.
En uno de los mensajes filtrados se puede leer que supuestos administradores TI de Microsoft habrían explicado lo siguiente: “Los enlaces web de las cuentas de Azure Active Directory (AAD) y las cuentas de Microsoft (MSA) en la aplicación Outlook para Windows se abrirán en Microsoft Edge en una vista única que muestra el enlace abierto junto con el correo electrónico del que proviene”. Después de implementar la característica en la aplicación de Outlook, Microsoft quiere llevarla a Teams.
Esta imposición de Microsoft no altera la configuración del navegador web establecido por defecto en Windows, pero sí la ignora en caso de que el usuario de Microsoft 365 abra un enlace desde la aplicación de Outlook ahora y de Teams más adelante.
A pesar de las quejas de los administradores de TI, la corporación parece decidida a seguir adelante, así que ya estaría empezando a implementar gradualmente la imposición entre los usuarios de Microsoft 365 mientras que los administradores de TI reciben un aviso 30 días antes de que sea introducida en la aplicación de Outlook para Windows.
A pesar de lo poco ético de la medida, parece que esta puede ser revertida desde la configuración de la propia aplicación. Sin embargo, eso no cierra la puerta que a pequeñas empresas les cueste averiguar qué ha cambiado, sobre todo cuando el usuario vea que, tras hacer clic sobre un enlace en la aplicación de Outlook, no aparece la interfaz que está habituado a usar, lo que puede dar la impresión de que ha perdido parte de su configuración (marcadores, historial, etc.).
Los usuarios suscritos a los planes Personal y Familiar de Microsoft 365 también se verán afectados por la medida. La compañía explica que “esto le permite acceder, leer y responder fácilmente al mensaje utilizando su perfil autenticado coincidente. No más cambios disruptivos: solo su correo electrónico y el contenido web al que necesita hacer referencia en una sola vista en paralelo”. Todo pintado de forma muy bonita, pero seguro que más de uno reacciona con enfado.
A pesar de que la imposición parece que puede revocarse al menos con algunos planes de Microsoft 365, no deja de ser una forma de quebrantar la voluntad ejercida por el usuario sobre el sistema operativo. Algunos han recordado la guerra sucia emprendida por la compañía hace más de dos décadas para imponer el infame Internet Explorer, y es que el historial de Microsoft con este tipo de actuaciones es difícil de disimular a estas alturas.