Microsoft Edge se despide de Windows 7 y Windows 8.1, versiones cuyo soporte oficial ha terminado este mes. En el caso de Windows 7 ya lo había hecho, excepto en su edición empresarial; y en el de Windows 8.1 lo hace ahora. Sea como fuere, las dos versiones del sistema operativo de Microsoft han finiquitado su ciclo de vida para los restos. A partir de ahora es Windows 10, Windows 11 o jugársela.
Así, y como parte de la actualización mensual de mantenimiento de Windows, el último Patch Tuesday que recibirán Windows 7 y Windows 8.1, se incluye Microsoft Edge 109, que al igual que otros navegadores como el mismo Chrome, abandonan el soporte de estas dos versiones. O, dicho con otras palabras, la actualización hacia Windows 10 o Windows 11 ya no es opcional, sino un requisito indispensable para conservar unos mínimos de seguridad.
Por lo demás, Microsoft Edge 109 es una versión bastante escueta que se nutre de los parches de seguridad y corrección de errores de Chromium y poco más, de nuevo, con una excepción: la de la política TextPredictionEnabled que permite la activación de una función de ayuda para la escritura, si bien todavía no está disponible para todas las versiones del navegador, dependiendo de la plataforma. Por ahora solo lo está para Windows y macOS.
En concreto, TextPredictionEnabled es una adición al asistente de escritura del navegador que ‘proporciona sugerencias de gramática, ortografía y estilo’, incluyendo según el nivel que se aplique, predicciones de texto. Como se ve en la imagen, la diferencias entre una y otra modalidad es que el Editor de Microsoft «envía los datos a Microsoft para su procesamiento».
Ergo, el nuevo asistente de escritura de Microsoft Edge te ayudará con mayor o menor pericia dependiendo de los datos que le ofrezcas para trabajar. Es el sino de Internet: a mayor comodidad, menor privacidad. Que el usuario elija qué prefiere sacrificar. Dicho lo cual, por defecto se mantiene la asistencia básica, aunque es posible desactivarlo por completo la función con desmarcar la opción de marras.
Si eres usuario de Windows, de Microsoft 365 y en general usas el software de Microsoft a diario, no deberías preocuparte por la privacidad en relación a esta opción. Es como tomarte el café con sacarina después de hincharte a pasteles.