Debian, la archiconocida distribución comunitaria, cumple hoy su trigésimo aniversario, vamos a aprovechar la ocasión para dedicar la entrada de rigor a tan importante acontecimiento. Es imposible entender la historia de Linux sin Debian, que en la actualidad es la segunda distribución más veterana de todas las que se encuentran oficialmente en activo, solo por detrás de Slackware.
Además de demostrar su calidad durante el transcurso de los años, su alta popularidad la ha erigido como una base tecnológica que, junto a Ubuntu y derivadas varias, se ha convertido en el gran estándar del escritorio Linux, sin desmerecer la buena posición de la que también goza en el sector de los servidores, que es a fin de cuentas donde muestra mayor fortaleza.
Debian vio la luz el 16 de agosto de 1993 de la mano del actualmente fallecido Ian Murdock, quien combinó las tres primeras letras del nombre de la que fuera su esposa, Debra Lynn, y el suyo para bautizar a uno de los proyectos de software libre y código abierto más conocidos del mundo.
En aquellos tiempos el concepto de distribución era nuevo y la intención era hacer que su desarrollo estuviera abierto a cualquiera que quisiera contribuir. De hecho, la creación de Debian fue patrocinada por el proyecto GNU durante un año, desde noviembre de 1994 hasta el mismo mes de 1995. Aunque Ian Murdock es considerado como el “padre” del proyecto, en la fundación de Debian estuvo implicado un pequeño grupo de hackers cuya intención era crear un sistema operativo GNU/Linux que se mantuviera pegado a los principios del software libre.
Lo logrado durante el transcurso de su trayectoria es muy meritorio si tenemos en cuenta que siempre ha conservado su naturaleza comunitaria, lo que contrasta bastante en un panorama cada vez más dominado por las corporaciones.
La conservación de la naturaleza comunitaria del proyecto ha sido posible gracias a que se ha mantenido firme en sus principios, aunque eso no quiere decir que haya deambulado solo por el mundo, ya que, desde hace mucho tiempo, se encuentra debajo del paraguas de Software in the Public Interest (SPI), una corporación sin ánimo de lucro que fue creada por Bruce Perens, segunda persona que asumió el liderazgo de Debian.
La creación de SPI estuvo motivada en el hecho de que el proyecto GNU dejó de patrocinar a Debian, así que Perens decidió crear la corporación sin ánimo de lucro en 1997 como vía para dar sostenibilidad económica. SPI sigue en pie y hoy en día es más bien una especie de patrocinador fiscal que apoya a algunos de los proyectos más destacados del software libre y el código abierto, entre los que están 0 A.D., Arch Linux, Ffmpeg, Fluxbox, PostgreSQL, LibreOffice, MingGW, systemd y Xorg, por nombrar algunos de los más conocidos.
Treinta años de un proyecto que ha aportado tanto dan para una extensa enciclopedia por fascículos, así que vamos a dejar la historia para centrarnos en lo que resulta más tangible para los usuarios: las aportaciones tecnológicas.
La aportación más destacada de Debian es probablemente es el gestor de paquetes dpkg
, que se mantiene en desarrollo en nuestros días y básicamente se trata de una herramienta a bajo nivel que permite instalar, eliminar y proporcionar información de paquetes Deb, los cuales son conocidos por cualquiera que haya usado Linux mínimamente en serio.
Sin embargo, posiblemente la mayoría haya interactuado más con APT (Advanced Package Tool), una interfaz de administración creada para lidiar con los paquetes proporcionados a través de los repositorios. Fue implementada oficialmente en 1999, con el lanzamiento de Debian 2.1.
En lo que respecta al desarrollo, Debian se encuentra actualmente compuesta por tres ramas: Stable, Testing y Unstable. La primera es la actual versión estable de la distribución, la segunda corresponde a la futura versión estable que se encuentra en desarrollo y la tercera, también llamada por muchos Sid (que es más bien el nombre de la versión, mientras que la actual Testing es Trixie y la actual Stable es Bookworm), contiene paquetes que están más verdes y menos pulidos. No hace falta decir que los paquetes que superan la fase de Unstable pasan a Testing y lo que se encuentran en Testing va actualizando de versión hasta llegar al punto de congelación, a partir del cual se empieza a definir la futura Stable.
Como ramas menos conocidas también están Oldstable, que corresponde a la anterior versión stable; Oldoldstable, que es la antepenúltima versión Stable; además de Experimental, que es un área de preparación temporal de software altamente experimental que probablemente rompa el sistema
Un detalle curioso de Debian es que los nombres en clave de las distintas versiones son tomados de los personajes de la saga de películas de animación Toy Story. Y es más, el logo del proyecto está inspirado en la barbilla de Buzz Lightyear, tal y como se puede ver en la siguiente imagen.
Y hasta aquí nuestro breve repaso de los inicios de Debian y algunas de sus aportaciones tecnológicas más destacadas. Obviamente, treinta años dan para mucho y no todas las páginas escritas cuentan historias bonitas. Aquí se puede destacar la agria discusión que hubo en torno a la adopción de systemd, que llegó tan lejos que aquellos que no estuvieron de acuerdo terminaron por irse y fundar Devian.
Dejando de lado todo lo expuesto, tanto lo bueno como lo malo, es innegable que Debian está en estado de gracia tras encadenar dos lanzamientos de gran calidad, Bullseye y Bookworm, los cuales han convencido a muchos usuarios gracias a su software pulido y a la estable experiencia que proporcionan, y es que esta distribución ha sido tradicionalmente un símbolo de alta calidad.