Microsoft sigue mejorando su antivirus, Windows Defender, constantemente. Y no solo mejorando el motor y la base de datos para hacer frente a las amenazas, sino también en cuanto a los escudos de protección que nos ofrece. De esta forma, aunque Microsoft no ha hablado públicamente de ello, el nuevo Windows 11 22H2 incluye, dentro de Windows Update, un escudo que nos ayuda a proteger nuestras contraseñas de posibles estafas. Así funciona.
-¿Cómo es la protección mejorada contra phishing?
Los nombres de usuario y las contraseñas son uno de los elementos más atacados por los piratas informáticos. Hacerse con ellos implica tomar el control total y absoluto de las cuentas de los usuarios. Hay muchas formas de guardar las contraseñas en el ordenador. Algunas de ellas, por ejemplo, suelen ser seguras por defecto, mientras que otras pueden estar poniendo las claves en peligro sin que lo sepamos. Pero, lo más común es que seamos nosotros los que ponemos estas claves en peligro.
Gracias a este nuevo escudo del antivirus de Windows vamos a poder estar un poco más protegidos frente a este tipo de ataques. Al activarlo (que viene desactivado por defecto) podremos encontrarnos con una serie de notificaciones que nos avisarán a la hora de introducir contraseñas en programas o webs inseguros. Por ejemplo, Windows Defender nos mostrará un mensaje de peligro cuando copiemos una contraseña en un bloc de notas, procesador de textos o en una hoja de cálculo, entre otros.
También veremos un aviso cuando intentemos reutilizar una contraseña en una página web a la hora de registrarnos para intentar acabar así con esta fea, y frecuente, práctica.
-¿Cómo activar la protección mejorada de Windows Defender?
Aunque la protección contra phishing viene activada por defecto en Windows Defender, los dos escudos que nos interesan no. Por tanto, debemos activarlos nosotros a mano. Para ello, abrimos la ventana de configuración de Windows Defender, y nos vamos al apartado Control de aplicaciones y navegador > Configurar protección basada en reputación > Protección contra el phishing.
Una vez aquí, debemos activar esas dos opciones. Al hacerlo, y tras aceptar una ventana de UAC para confirmar los permisos de administrador, Windows Defender empezará a controlar el uso indiscriminado de nuestras contraseñas, avisándonos cuando vayamos a reutilizarlas o cuando las copiemos en un almacenamiento no seguro, como un documento de texto.
La idea es buena, y está muy bien llevada a cabo para que los usuarios eviten poner en peligro sus contraseñas. Pero Microsoft tiene que mejorarla un poco más, ya que intenta depender tanto de Edge que deja a Chrome, Firefox y otros navegadores fuera de su protección. Y, con ello, a la inmensa mayoría de los usuarios.