Estas son un conjunto de elementos que forman parte del propio sistema Windows y que permiten al software, especialmente a los juegos, hacer uso del hardware para la reproducción de audio y vídeo. A lo largo de los años han sido varias las versiones que nos hemos encontrado de estas librerías. En estos momentos la última versión de la que podemos echar mano son las DirectX 12 que se lanzaron en 2015. Una de sus principales ventajas fue reducir la sobrecarga de la CPU a la vez que aumentaban el rendimiento de la GPU.
-Diferencias entre DirectX 11 y 12
Pero a pesar de las novedades que nos ofrece la última versión de las librerías que os comentamos al jugar, muchos se preguntan si realmente merecen la pena. Básicamente lo que queremos decir con esto es que muchos dudan acerca del aumento de rendimiento al pasar de la versión 11 a la 12 de DirectX. Lo primero que debemos tener presente es que aquí nos encontramos con una colección de APIs utilizadas para gestionar tareas relacionadas con la reproducción multimedia.
Esto incluye la programación de juegos en Windows y Xbox. Si nos centramos en la más reciente versión, las DirectX 12 una de las principales diferencias es cómo interactúan con el hardware del PC. Y es que la mayoría de los juegos desarrollados con DirectX 11 solo utilizan dos o cuatro núcleos de la CPU. Uno de estos se dedica a informar a la GPU de lo que tiene que hacer. Por su lado, DirectX 12 reparte la carga de trabajo de la CPU entre varios núcleos y permite que todos se comuniquen con la GPU al mismo tiempo. En resumidas cuentas, esta versión más reciente de las librerías aprovecha mejor el potencial de la GPU.
Además, en la última versión llegaron los PSO, objetos que describen el estado de todo el canal gráfico para aprovechar mejor la GPU, de nuevo. Esto reduce significativamente la sobrecarga de la CPU y mejora el rendimiento de los juegos.
-¿Qué librerías usar para jugar?
Hay que decir que DirectX 11 se lanzó en 2009, por lo que miles de juegos se han desarrollado utilizando estas librerías hasta 2015. De ahí que se considere que DirectX 11 es una API de alto nivel. Estas son más fáciles de usar para los desarrolladores logrando juegos estables y jugables. Por otro lado, DirectX 12 es una API de bajo nivel, permite a los desarrolladores afinar más la optimización, pero exige amplios conocimientos para utilizarla.
Esto quiere decir que un juego desarrollado en DirectX 12 podría acabar con peor rendimiento, todo ello dependiendo del conocimiento de la API que tenga el creador del título. DirectX 12 incluye mejoras, pero todo depende de lo bien que el desarrollador sepa implementarlas. Por este motivo, muchos prefieren seguir usando la API de alto nivel DirectX 11. Para aquellos que se pregunten qué deberíamos elegir en el PC, DirectX 11 o DirectX 12, veamos la respuesta.
En realidad, depende de varios factores, como el juego que vamos a ejecutar, ya que hay títulos que, aunque funcionen con DirectX 11, no nos permite seleccionar esta opción. Asimismo, hay juegos que son compatibles tanto con DirectX 11 como con DirectX 12, como Fortnite. Así podremos cambiar entre ambas versiones y probar, dependiendo de otro factor clave, nuestro hardware.
Casi cualquier GPU moderna es compatible con DirectX 12, pero no ocurre lo mismo con otras más antiguas. En definitiva, migrar de DirectX 11 a DirectX 12 no es tan fácil como parece. Depende de factores como el hardware disponible, el software, el sistema operativo y si el juego es compatible con ambos, aunque muchas veces podemos probar la opción que más nos conviene.