Esta es una de las soluciones software de estas características más populares que hay y que nos será de mucha ayuda en estas tareas. En realidad, nos referimos a la posibilidad de virtualizar sistemas operativos en nuestro equipo sin necesidad de realizar una instalación completa, como estamos acostumbrados. Esto nos permite echar un vistazo de primera mano a ese software y realizar todo tipo de pruebas sin que las mismas afecten al sistema operativo principal.
El abanico de posibilidades que con este tipo de trabajos se abren es enorme. En un principio basta con que descarguemos la imagen ISO del sistema en cuestión y lo carguemos en algún programa como VirtualBox. Además, si dañamos este sistema virtualizado por alguna razón, no tenemos más que volver a cargarlo sin que nada de ello afecte al sistema original de nuestro ordenador. Pero claro, este tipo de procedimientos de virtualización puede acarrear algunos inconvenientes en nuestro equipo. Debemos tener en cuenta que el consumo de recursos en estos casos suele ser bastante elevado.
Por todo ello es muy importante que configuremos el software que vayamos a utilizar para todo esto de la mejor manera. Un claro ejemplo de esto que os contamos lo encontramos en el mencionado programa VirtualBox que nos propone multitud de parámetros personalizables. Entre otras muchas cosas, gracias a estos elementos podremos lograr que las máquinas virtuales aquí cargadas funcionen mucho mejor.
-Cambios que mejoran el rendimiento de VirtualBox
Es por todo ello por lo que a continuación os vamos a hablar de dos funciones que tenéis la posibilidad de modificar en este programa. De este modo lo que logramos realmente es que las máquinas virtuales que se cargan en VirtualBox funcionan de una manera mucho más fluida. Esto es algo que con el tiempo agradeceremos, más si tenemos pensado usar de manera y que si va esta máquina virtual en concreto.
Así, una vez hayamos cargado la correspondiente imagen ISO en el programa, desde la interfaz principal no tenemos más que pinchar con el botón derecho del ratón en su nombre. De entre las opciones que aparecerán en el menú contextual aquí nos decantamos por la opción de Configuración. En pantalla aparecerán una serie de secciones situadas en la parte izquierda de la ventana correspondientes a todo lo que podemos configurar. Pues bien, lo primero que vamos a hacer es aumentar el número de procesadores a utilizar por esta máquina virtual.
Para ello no tenemos más que situarnos en la opción llamada Sistema donde nos encontramos con varias pestañas. Pinchamos en la llamada Procesador y ya tenemos la posibilidad de desplazar la barra deslizante que aparece para elegir el número de procesadores que vamos a utilizar en esta máquina virtual en concreto cargada en concreto.
Con el fin de mejorar el funcionamiento de las máquinas cargadas en VirtualBox, igualmente os recomendamos que os situéis en el apartado llamado Pantalla. Como podréis ver de primera mano, en esta ventana tenéis la posibilidad de marcar la opción Habilitar aceleración 3D. Por defecto esta función viene desactivada y nos permite hacer uso de la GPU para todo el apartado gráfico de las máquinas virtuales aquí.